Apoyo la fertilización in vitro (FIV) porque creo en el derecho de toda persona a tener una familia, porque el derecho de ser padres o madres no puede estar limitado ni condicionado por nadie más allá de nuestra voluntad personal y/o la de nuestra pareja. Los derechos humanos no deben estar en una relación proporcional y directa a la condición económica de las personas. Prohibir el FIV en nuestro país trunca el derecho a la maternidad o paternidad de quienes no poseen los recursos económicos para realizarse dicho procedimiento en el extranjero. Una discriminación que empaña a Costa Rica como nación defensora de los Derechos Humanos.

Costa Rica no puede elegir no acatar una sentencia dada por una corte de derecho que está por encima de todas las demás cortes que han resuelto el caso. Una sociedad de derecho debe respetar las creencias de quienes la integran, incluyendo a quienes sí creen en los avances de la ciencia para el beneficio de la humanidad.

Una posición en favor del FIV es una posición en favor del amor y el derecho a crear una familia. Un derecho que todos los costarricenses debemos disfrutar.

Demos la oportunidad de tener sus hijos e hijas a quienes no pueden pagar un viaje al extranjero para realizarse este procedimiento. Que esta discriminación ya no afecte la imagen de Costa Rica como nación defensora de los Derechos Humanos.

La vida es un derecho y no una obligación. En ciertas situaciones la persona debería poder rehusar los tratamientos médicos para vivir sus últimos momentos en forma digna. Es por ello que presenté junto al diputado Carlos Arguedas el Proyecto 19440, “Ley sobre Muerte Digna de Pacientes en Estado Terminal”. El objetivo de este proyecto es garantizar la calidad de vida del paciente y su familia, algo que el Estado debe brindar.

Muerte Digna no es lo mismo que eutanasia activa. El Proyecto de Ley de Muerte Digna no contempla la muerte asistida del paciente, sino que simplemente brinda la posibilidad de no intervención, es decir, rehusarse a tratamientos médicos. El punto medular del proyecto es el derecho de los pacientes a desistir de manera voluntaria de tratamientos o la utilización de máquinas o medios artificiales que prolonguen su vida innecesariamente y que tengan un impacto negativo grave en su calidad de vida. Se trata del respeto a la autonomía y libertad del paciente.

El proyecto también resguarda el derecho del paciente y su familia a recibir la información completa sobre los riesgos y consecuencias en caso de rehusarse al tratamiento propuesto u ofrecido. Los pacientes deben participar en forma activa en la toma de decisiones sobre los planes terapéuticos del cuidado paliativo. La decisión del paciente debe darse en forma libre, consciente e informada. También existe la opción de suscribir un testamento vital por el cual disponga de previo su decisión de no someterse a tratamientos médicos innecesarios y de rechazar la utilización de máquinas o medios artificiales para mantener la vida.

El Proyecto de Ley de Muerte Digna interpreta restrictivamente los grupos cubiertos por esta ley. Los sujetos del proyecto son personas con enfermedades en fase terminal y personas con enfermedades crónicas degenerativas e irreversibles de alto impacto en la calidad de vida.

La muerte digna no es contraria al derecho a la vida. El derecho a la vida debe armonizarse con el derecho a la dignidad humana, con el libre albedrío y con el respeto a la auto-determinación personal. El derecho a la muerte digna es parte del derecho a la salud.

Otra de las razones para impulsar el teletrabajo es el beneficio ambiental que se logra al disminuir la cantidad de vehículos en las calles y reducir el congestionamiento urbano. ¿Cuánto tiempo dedica usted al día en ir y venir del trabajo? El Teletrabajo puede ser una herramienta útil para disminuir las presas en el centro de las ciudades y las principales vías de circulación. Al ayudar a reducir los congestionamientos, el Teletrabajo contribuye en la disminución de la contaminación no solo del aire, sino también la sónica.

El proyecto que presentamos para incorporar el Teletrabajo a la legislación laboral existente, tiene el valor agregado de que incorpora la perspectiva de género, gracias a la incorporación de las recomendaciones de la Unidad Técnica de Género de la Asamblea Legislativa.

La Obesidad como problema de Salud Pública tiene niveles de epidemia en el mundo. Costa Rica no es la excepción: 60% de sobrepeso en adultos y 20% en niños según la última Encuesta Nacional de Nutrición (2009). Pero es un problema complejo. La publicación obligatoria de la información nutricional en restaurantes es solo una de varias acciones que como sociedad debemos asumir.

Los consumidores tendemos a subestimar esta información, lo que nos lleva a ingerir más calorías de las recomendadas cuando comemos fuera de casa. Un mal hábito en el consumo de alimentos es no controlar lo que comemos con respecto a si nos sentimos satisfechos. Más bien, nos guiamos por lo que vemos en el plato. Si nos sirven más, comemos más. Esto se agrava con la tendencia de algunos restaurantes de servir porciones más grandes.

El Proyecto 19458 Ley de Publicación Obligatoria de la Información Nutricional delos Alimentos por parte de las Cadenas de Restaurantes, busca que los consumidores puedan ver las calorías de las raciones que se ofrecen en los menú, de tal manera que puedan tomar decisiones con mayor información. También serviría para que las cadenas de restaurantes suministren en sus locales la información de sodio, azúcar y grasas. Esto pensando en quienes están con alguna dieta especial, como quienes padecen diabetes e hipertensión.